Reportajes director

Publicado el 8 junio, 2020 | por editor

Agrícola “Los Tatas”: una historia de reconversión

Francisco Medina, es angolino, hijo y nieto de agricultores, un apasionado del campo. De profesión Ingeniero Agrícola con mención frutícola de la Universidad Inacap Temuco, ha transitado por diversos caminos que la vida le ha impuesto para transformarse en un emprendedor del agro, un hombre que cree en los cambios y en la reconversión.

Tenía 8 años cuando falleció su padre y tuvo que tomar la responsabilidad de cuidar a su madre, cosa que hizo con la ayuda de sus abuelos, a quienes cariñosamente llamaba Tatas. De ahí el nombre y sello de su empresa “Agrícola Los Tatas”, predio ubicado en el sector de Tijeral, comuna de Renaico.

“Desde pequeño comencé a trabajar en el campo, así se enseñaba antiguamente a todos los hijos y nietos de agricultores. Había que ganarse los pesos de alguna manera, algo que no vemos en nuestros días, ya que las nuevas generaciones de padres son muy sobreprotectoras. Cuando terminé de estudiar en la universidad, realicé mi práctica en la ciudad de Rancagua, en la empresa David del Curto en huertos”, comenta.

Con cero experiencias, en 2006 se presenta la posibilidad de encabezar un gran proyecto de cerezas en la zona donde recibió la guía de su jefe.

“Estoy muy agradecido, pues me enseñó todo sin filtro y yo aproveché al máximo la oportunidad entregada, luchando día a día por su proyecto, como si fuera mío. Nunca perdí la visión y promesa realizada a mi abuelo que algún día yo concretaría mi propio sueño. Aquí estuve hasta el 2018 a cargo del área de producción, multiplicación de plantas en vivero, formación y establecimientos de huertos, producción, venta y seguimiento del producto. Creo que en mi desarrollo profesional también ayudó mucho los valores del rugby, deporte que me apasiona, donde aprendí de respeto, integridad, pasión, solidaridad y disciplina, aspectos necesarios de aplicar en el campo cuando existen decisiones complejas, sin dejar de lado al equipo”, acota.

Desde el 2008, Francisco Medina realizó tareas paralelas a su trabajo, con el fin de lograr cierto capital y crear su proyecto personal. Sin iniciación de actividades, comenzó a facturar a nombre de terceros realizando arriendos para cultivos anuales, polinizaciones, entre otros. Así, el 2011 contituye Agrícola Francisco Medina Elgueta EIRL, alias Agrícola Los Tatas, tomando la memoria de sus abuelos.

“Fue como un agradecimiento, ya que ellos habían repartido en vida el campo a todos sus hijos y en este caso yo y mi hermana, siendo mayores de edad nos vimos beneficiados con lo que le correspondía a mi padre ya fallecido. En 2012 mi ex jefe me dio la posibilidad de tener un vivero en conjunto, para generar plantas de cerezas, lo que también sirvió para mis primeras 7 hectáreas de cerezas que fueron plantadas en 2014. El año 2018 vinieron 22 nuevas hectáreas y 24 hectáreas este año 2020, llegando a un total de 53 hectáreas, donde tengo compromisos con mi esposa, hermana, tíos y primos, los cuales ya tienen sus propios proyectos y nos apoyamos como familia”, cuenta.

Ser independiente no ha sido fácil, pero el desafío era darle más tiempo a la familia y materializar un sueño personal, contar con una empresa dedicada al cultivo de cerezas y ampliarse a otros rubros del agro. Su receta: trabajo duro, perseverancia, contar con equipos que vean a un líder, no un jefe.

“Este sueño nos exigía generar el ingreso mensual inventando distintos proyectos, como ganadería, viveros y cultivos anuales. Es importante destacar el apoyo clave de mi esposa y mis hijas quienes han tenido que priorizar y dejar de lado tiempos o cosas materiales por nuestros objetivos. Además de la familia, amigos y colaboradores los cuales nos han tendido la mano cuando hemos necesitado. Los proyectos nos permiten generar Agrícola Las Nenas en honor a mis hijas, empresa dedicada a la producción de plantas de cerezos y ganadería bovina. Siempre me voy adecuando a los tiempos que vivo, siguiendo con detalle el negocio, pensando que hay que intentarlo aunque no resulte”, explica.

La pandemia

En marzo de 2020, Francisco Medina suspendió las labores en el campo, a fin de evitar el contagio entre pares y por ende, afectar a las familias de sus trabajadores, pensando que sería un plazo no mayor a 20 días.

“Esto nos dio tiempo para estudiar la situación. En general modificamos varias cosas, pensando en la salud y convivencia de todos, guardando las distancias, procedimiento de higiene y limpieza, traslados desde la casa al trabajo y viceversa, y la forma de ejecutar labores agrícolas.

“Era necesario, pues llevo mi tercera temporada exportando como Agrícola Los Tatas y trabajando para distintas exportadoras que reciben mi fruta: Greenex, San Clemente y Garcés. Esta es una industria muy dinámica, ya que existen muchos factores que no podemos controlar como clima, gustos del consumidor y comprador, trámites y aspectos logísticos, es un rubro intensivo en mano de obra, lidiar con aspectos financieros y bancarios, mercado y tipos de cambio variables, tipos de variedades de fruta y calidad. Siempre hay que estar muy atento a los cambios. Si bien a inicios de temporada se veía un año muy bueno en lo productivo y económico, con las ventas antes del año nuevo chino para nosotros superiores a las 2 temporadas anteriores (Variedad lapins), post año nuevo chino nos vimos afectados en una baja respecto a las temporadas anteriores no mayor al 20%, pero nos favoreció el tipo de cambio, el cual estuvo muy superior a lo presupuestado”, señala.

Francisco Medina cree que lo que viene es desafiante. “Esta pandemia nos va a dejar mucha experiencia, primero ser mejores personas y valorar más el trabajo de nuestro compañero y entorno. Ser más respetuosos, íntegros, solidarios y disciplinados. En el aspecto productivo, es necesario seguir mejorando, enfocarse en producir con calidad y no siempre pensando en la cantidad de fruta”, dice.

Medina cree que la industria tendrá que abrirse a distintos canales de comercialización, ya que no es fácil desviar los destinos en último minuto.

“Se viene con fuerza el comercio electrónico, orientado a los mercados internacionales, por lo tanto, mi norte es ser un buen productor que busca la asociatividad con empresas exportadoras. Entonces, el mensaje en un contexto complejo es, creer en tus sueños, porque nada es imposible. No hay que temer a equivocarse, sino tomar las cosas como un aprendizaje, pues el éxito no es un accidente, sino trabajo duro, perseverancia, estudio, sacrificio y más que todo, amor por lo que haces”, puntualizó.

Sercotec un aliado

En este andar, Francisco Medina se acercó al Centro de Negocios Sercotec Angol, con la idea de ordenarse administrativamente y postular a proyectos.

“Así pude armar un buen plan de negocios a través del Modelo Canvas y saber de las garantías utilizadas para financiamiento bancario. Además, pude cofinanciar 2 proyectos Crece Sercotec, obteniendo un nebulizador el 2018, el cual permitió proteger nuestros árboles y fruta. Actualmente, esta herramienta se utiliza para ayudar a la comunidad en la sanitización del sector Tijeral, en la comuna de Renaico, donde viven muchos de mis trabajadores y sus familias. Luego, en 2019 Agrícola Las Nenas, dedicada a la producción de plantas de cerezos en vivero, se postuló para mejorar las condiciones de los trabajadores, que en este caso es un comedor”, cuenta entusiasmado.

Este año se adjudicó un proyecto Corfo, gracias al apoyo de su ejecutivo de Sercotec, Rubén Vera, que permitirá la implementación de un Hidrocooler para la mejora competitiva en exportación de Agrícola Los Tatas – Renaico, lo cual mejorará la condición de las cerezas, aumentando la vida de post cosecha.

“Valoro el apoyo de mi ejecutivo, que me ha ayudado en aspectos técnicos de negocios, apreciando otras realidades como el rubro turismo, comercio y servicios, al momento de participar en reuniones del Directorio. Muchas veces vemos impedimento al momento de postular a proyectos, pues requiere tiempo, muchos papeles y eso desgasta un poco. Pero pasa porque no tenemos claras nuestras ideas, no estamos dispuestos a pedir ayuda y perseverar. Aquí el Centro de Negocios Sercotec es un excelente aliado”, señala

Por su parte el director regional de Sercotec, René Fernández Huerta, comenta que la historia de Francisco sin duda representa el espíritu de superación del emprendedor, el que hoy en día busca las herramientas para superar los obstáculos y continuar su proceso de crecimiento.

“Ejemplos así son los que nos llenan de energía para seguir trabajando por quienes mueven la economía en nuestra región, donde nuestro Centro de Negocios Sercotec Angol ha sido un aliado importante para que este empresario pueda seguir creciendo. Invito a todos quienes tienen su negocio, o estén próximos a concretarlo que se contacten con esta medida de gobierno, en el encontrarán acompañamiento, asesoría y capacitaciones que son tan importantes en estos difíciles momentos que estamos viviendo como país”.

 


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